domingo, 22 de agosto de 2010

Un gesto de amor

Es sorprendente la calidez humana que existe en este mundo, aún a pesar de la ola de maldad que nos rodea. Una prueba de ello, es el lindo gesto de amor que tuvieron decenas de jóvenes universitarios, con una parte de la población peruana de bajos recursos económicos. Contribuyendo con ellos a través de la construcción de casas en San Juan de Lurigancho y Puente Piedra.

Es gratificante tener conocimiento de este tipo de acciones, que simples ciudadanos (por decirlo de alguna manera) tienen con las personas que viven en condiciones más humildes. Pero considero que la ayuda no sólo debe ser por parte de las instituciones que se encargan de hacer estos buenos actos. Pues la ayuda tiene que venir también por parte de los gobernantes de nuestro país.

"Un techo para mi país", es una asociación latinoamericana sin fines de lucro liderada por jóvenes de distintos países de América Latina que se dedica a la construcción de casas pre-fabricadas en las zonas más pobres, con la finalidad de brindar a los habitantes de dichos lugares una mejor calidad de vida.

Ahora que se vienen las elecciones, esperemos que los nuevos gobernantes se dediquen a velar por las necesidades de las personas más necesitadas de nuestro país y que el interés de preocupación que muestran antes de las elecciones, no se termine a la hora que se conoce al ganador, sino que perdure durante toda su trayectoria política e incluso después de esta. Pues así como los integrantes de "Un techo para mi país" y otras instituciones dedicadas a realizar estos tipos de acciones se comprometen sin que nadie se los pida; entonces, esperemos que reciban la ayuda sin que nadie se las ofrezca, para que continúen ayudando a más personas.

Hago mención de esta organización, porque vale la pena hacer que se conozca la labor social que realizan. Bien por ustedes jóvenes de "Un techo para mi país" muchos augurios en sus vidas y sigan así. Gracias por la ayuda que brindan. 

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